Copa América – Nos quedamos con las ganas.
Nos quedamos con las ganas de ver la primera batalla naval de esta America’s Cup (un paréntesis entre las batallas legales) por falta de un viento estable.
Y es que ayer, mientras esperábamos en la boya de barlovento a que se estableciera un viento adecuado y ver por fin en acción a estas maravillas tecnológicas, nos preguntábamos y hacíamos cábalas sobre la dificultad de conseguir un viento adecuado para esta regata y su enorme superficie de campo de regatas.
Me explico, por un lado tenemos las limitaciones de viento y ola que el jury considere aplicar. Por otro, al ser un campo de regatas tan grande (20 millas entre la salida/llegada y la boya de barlovento) es muy fácil (como ayer) que con vientos ligeros sea dificilísimo establecer un campo con dirección y velocidad similares. Los lugareños navegantes conocen de sobra las diferentes condiciones que te sueles encontrar, ahora en invierno, entre navegar cerca de la costa o un poco mar adentro. Con vientos más fuertes será fácil encontrar estas condiciones similares, pero entonces entran en juego las limitaciones de seguridad en cuanto a fuerza de viento y altura de la ola.
Para el próximo miércoles podríamos encontrar condiciones estables a partir del mediodía, según los gurús meteorológicos, pero veremos si no se aplaza otra vez. Un nuevo aplazamiento nos llevaría a tener regata el domingo, lo que permitiría a muchos aficionados presenciarla.